La nube tiene un precio y toda empresa tiene que ajustar presupuestos prediciendo posibles costes futuros. Elegir los recursos que se necesitan para satisfacer las necesidades es lo normal, pero siempre hay que hacerlo teniendo la partida presupuestaria en mente.
Hay empresas que aprovechan totalmente el cloud
Según una encuesta de Flexera, las empresas desperdician 1/3 de las inversiones en cloud computing y tienen dificultades para apostar por proyectos cloud que funcionen eficientemente. Esto significa que el grueso de la inversión en el cloud se acaba desperdiciando.
Sin embargo, en dicha encuesta se pregunta sobre cuánto dinero de la inversión en la nube es eficiente, y se estimó en un 68%. A esto hay que sumarle que los encuestados aseguraban que, de todos los proyectos de cloud, un promedio del 13% están por encima del presupuesto. Conviene subrayar que esta encuesta estudiaba el impacto post-pandemia de la nube, destacando el auge de las prácticas de FinOps.
Por qué se desperdicia el dinero en la nube
Como primera razón, encontramos la ausencia de control o monitorización continua sobre los costes de la nube. Nuestra labor no termina al contratar un servicio de cloud computing en base a un presupuesto inicial, sino que debemos administrar los continuos costes.
Pensad en la crisis energética que ha traído la subida de los precios de los combustibles y la energía eléctrica. Las facturas que están llegando a muchas empresas y hogares son mucho más caras, y si no monitorizamos el uso, estaremos gastando de más.
Por tanto, hay que monitorizar el uso y los costes para tomar medidas y poder reducirlos con el objetivo de evitar sobrecostes.
La segunda razón, y es la más común, es no gobernar el cloud. Ya hablamos en su momento de qué era la gobernanza de la nube, y se trataba de establecer unas políticas de uso, administración, acceso y gasto. Normalmente, hay un equipo encargado de esta tarea, soliendo estar compuesto por administradores, desarrolladores e incluso usuarios que velarán por la salud financiera y operativa de la nube.
Ejemplificando un poco, es un caso común la infrautilización de un servidor contratado o una capacidad de almacenamiento que es notablemente superior a lo que se necesita.
Cómo ser más eficiente en los presupuestos cloud
Las claves para cuadrar un presupuesto de servicios cloud está en:
- Establecer unas políticas (gobernanza) de uso, administración y mantenimiento.
- En vista a dichas políticas, conocer qué es lo que se necesita y cómo se va a usar.
- Contratar lo óptimo: ni más, ni menos.
- Y si necesitas más, la escalabilidad de la nube es casi automática: con un clic puedes tener más recursos.
Como última razón sobre la pérdida de dinero en el cloud, podemos encontrar la nula optimización en las implementaciones. Es el clásico ejemplo de contratar “lo mejor” y no lo que necesitas, trayendo como consecuencia un sobrecoste evidente.
Por ejemplo, es posible que Kubernetes ayude a tu plataforma, pero no la conozcas o simplemente tengas contratado un servicio incompatible. Por esto decimos que establecer unas políticas es fundamental en cualquier empresa a día de hoy. Y si no es posible llevarlo a cabo, Arsys ofrece su servicio de Managed Kubernetes, permitiendo a empresas pequeñas disfrutar de los beneficios de la orquestación de contenedores.
La solución más compleja puede ser peor que la más simple, así que debemos elegir la solución más apta para NUESTRO NEGOCIO. No hay que olvidar que el cloud computing supone una herramienta de trabajo vital para muchas empresas, por lo que debe permitirnos construir, implementar y operar por el menor dinero posible.
Cada empresa es un mundo y no todas necesitan un MultiCloud o una nube híbrida, puede bastar con una nube pública. Luego, hay casos de plataformas o arquitecturas concretas muy interesantes que no son puestas en marcha por desconocimiento tecnológico. Si no sabes cuál elegir, contacta con nosotros y te ayudaremos.