GitLab es, básicamente, una aplicación online para hospedaje de repositorios Git a la que se le han agregado varios servicios estrechamente relacionados con el sistema de control de versiones y las operaciones de desarrollo. Profundizamos un poco en su uso y las ventajas que tiene utilizarlo desde la Nube.
Cualquier equipo de desarrollo debería incorporar algún sistema de control de versiones del software entre sus aplicaciones del día a día. Es por ello que Git, la herramienta de control de las versiones del software más popular, está de moda desde hace años. Por su parte, GitHub ha sido tradicionalmente el servicio más usado para alojar repositorios de Git, sobre todo en cuanto a proyectos Open Source se refiere. Si te queda alguna duda en cuanto a estas herramientas, te recomendamos leer nuestro artículo sobre Git y GitHub.
¿Por qué GitLab?
GitHub y otros servicios similares de alojamiento de repositorios Git como Bitbucket, están muy bien, pero sin embargo, para proyectos privados, no todas las empresas ven con buenos ojos ceder el control de su software a terceros. En cambio, prefieren beneficiarse del uso de Git, pero mantener ellos mismos sus servidores de alojamiento de los repositorios. Bajo este marco, GitLab aparece como líder indiscutible.
Podemos decir que GitLab es un equivalente a GitHub, solo que tú eres el dueño de la plataforma donde se van a alojar tus repositorios Git. En otras palabras, es una aplicación de software libre, gratuita para cualquier uso, que podemos instalar en un servidor y que nos ofrece los mismos servicios que GitHub (y otros adicionales), pero sobre tu propia infraestructura.
Con GitLab puedes contar con un sistema de control de versiones remoto centralizado, donde todos tus desarrolladores sincronicen las versiones del software que se está desarrollando. Por supuesto, es capaz de almacenar cualquier número de proyectos, obviamente siempre que haya espacio disponible en el disco del servidor.
¿Qué más ofrece GitLab?
Gitlab es un servicio mucho más completo de lo que ofrece Github. Además de proporcionar un servidor Git, con una completa interfaz web para el acceso y visualización del estado de los repositorios, dispone de un conjunto enorme de utilidades paralelas, que harán las delicias de los desarrolladores y del equipo DevOps.
En comparación con GithHub, cuenta con diversos añadidos interesantes, como un mayor control de los permisos de los usuarios, el progreso de los proyectos o la protección de determinados estados del software. Pero, además, dispone de algunas herramientas esenciales para los equipos de desarrollo modernos, como un servidor de integración continua (CI, también incluido en la instalación de GitLab en Cloudbuilder Next) mediante el cual se puede testar, construir y desplegar el software de manera automatizada.
Debido a la naturaleza del servicio, es esencial contar con servidores que sepamos que serán capaces de albergar cantidades muy variables de información, por lo que es más que recomendable instalarlos en Servidores Cloud. Así, por más que crezcan el número de proyectos y las versiones o ramas del software, podrás alojar todos los datos sin miedo a perderlos.